Nació de las olas del mar y un rayo de luna azul en una noche de esas donde la sirenas bailan hasta el amanecer.
Su cabellos son de espuma de mar y en sus ojos se refleja el color de las algas que ni verdes ni azules son.
En su piel arrebolada, el brillo de la arena; y su voz suena al rumor de las caracolas, a las olas lejanas que rompen en la arena como las voces de los hombres que sueñan callados.
Valentina cuenta las estrellas del cielo:
Y algún planeta que se deje ver, Venus que es prima hermana de la luna. Alguna vez Marte que se pone colorado si lo ven. Valentina es feliz y a la luz de la luna salta, brinca y canta una canción:
Una...,
dos...,
tres...
Ilustración de Anne Julie Aubry |
♪Tú eres mi sol.♫
♫Tú eres mi luna.♫♪
♪♫Tú eres la alegría de mi corazón.♫
♫Ven conmigo y de noche y de día canta mi canción .♪
Así hasta el amanecer, cuando sale el sol y las sirenas se echan a dormir.
Porque ella es sirena de noche y pajarillo de día.
Así sueña, noche a noche, día a día.
Qué historia más bonita y más tierna.
ResponderEliminarMe ha encantado, Mag.
Mil besitos, preciosa.
A veces soy un poquito moñas. Pero hay alguien que es así, una pequeña sirenita, un gran pájarillo.
EliminarUn besito muy grande.
Hum! Sirena de noche y pajarillo de día... cada vez, te funciona mejor la imaginación.
ResponderEliminarBesitos ratunos.
Cualquier día pierdo la cabeza :-)
EliminarUn qamarbesi :-)
Las sirenas son especiales y la de este cuento también lo es :)
ResponderEliminarEn ello llevas razón. Es alguien muy especial.
EliminarUn besote.
Sirena de noche, pajarillo de día, pero en ambas formas canta su canción. Bonito cuento lleno de magia.
ResponderEliminarBeso dulce para ti.
Hola, Dulce. Me alegra esa magia.
EliminarUn besito.