Erase que es un lugar de esos que nadie conoce pero que todo el mundo sueña que exista y desearía visitar alguna vez. Uno de esos sitios es la fábrica de estrellas. Está más allá de donde se pueda alcanzar imaginar y está tan bien custodiado que los astrónomos nos cuentan otras historias.
Dentro de un enorme enorme, súper hiper enorme caldero mágico se cuece muy lentamente, bajo la supervisión de una magistral Maga, un casi secreto mejunje que al hervir produce un sinfín de burbujitas estelares, compuestas por un gas resplandeciente que exhala unos aromas increíbles e indescifrables. Tras un tiempo de cocción, aquello empieza a chisporrotear. Esa es la señal que indica a la gran Maga del Universo que el potaje de estrellas está listo. Tiene que asegurarse de que hay suficientes para que el cielo sea como un tapiz de fulgurantes puntitos parpadeantes que los seres humanos admirarán, estudiarán y aprenderán de ellas.
Dentro de un enorme enorme, súper hiper enorme caldero mágico se cuece muy lentamente, bajo la supervisión de una magistral Maga, un casi secreto mejunje que al hervir produce un sinfín de burbujitas estelares, compuestas por un gas resplandeciente que exhala unos aromas increíbles e indescifrables. Tras un tiempo de cocción, aquello empieza a chisporrotear. Esa es la señal que indica a la gran Maga del Universo que el potaje de estrellas está listo. Tiene que asegurarse de que hay suficientes para que el cielo sea como un tapiz de fulgurantes puntitos parpadeantes que los seres humanos admirarán, estudiarán y aprenderán de ellas.
Nebulosa M78 de la Constelación de Orión Imagen de la red |
Pasan por un largo paseo, flotando sobre una especie de camino suave, bajo la supervisión del Hada Cazadora de Estrellas. En una mano lleva un cazaestrellas de hilos de plata que le regaló Qamar, la luna, a quien, en ocasiones, le gusta pasear junto a ella y dar su particular toque brillante. Así es que acaba cansada y se queda hecha gajitos por lo que luego debe descansar una semana para quedarse como nueva.
El Hada cazadora es la encargada de darles el primer nombre y destino. En ocasiones, tiene que cazarlas al vuelo pues surgen con mucha fuerza, muy alegres y dicharacheras, saliéndose de la fila y revoloteando como luciérnagas por toda la fábrica. Algunas logran escapar y ha de solicitar apoyo al Mago del Ejército Estelar para que sus duendes salgan en busca y captura ya que afuera hay muchos peligros: existen unos ladrones que se las llevan sin pedir permiso, se dan un paseo con ellas y las dejan a su libre albedrío.
"Cazadora de astros" | 1956 | Remedios Varo |
Cuando ya están listas, salen por una especie de chimenea formando una nube de algodón que puede adoptar diferentes formas: de champiñón, de espiral, de cigarro... y que se visten de mil y uno tonos que van desde el rosa hasta el rojo, del dorado al plata, del fucsia al azul y al violeta; del turquesa al naranja pasando por el amarillo...
Pero hay que tener cuidado porque no todas las estrellas son iguales. Ya lo dice la Super Maga a las maguitas que estudian para desempeñar algunas de las funciones que se pueden llevar a cabo en la fábrica:
—Hay mucho embaucador en el Universo, y los maestros se hacen llamar Cometas que navegan en sus órbitas alrededor de Tierra o de otros planetas o exoplanetas que son esos que dan vueltas entorno a otros soles, gobernados por otras Magas y Magos.
—¿Y quiénes son esos cometas tan malos? —solían preguntarle.
—No es que sean malos pero se apropian de lo que no es. Son como grandes bolas de nieve polvo. Están hechos de hielos que tienen agua, claro, amoniaco, metano... y todo eso mezclado con polvo... Son tan viejos que nacieron al tiempo que se creaba el Sistema Solar. Tienen el corazón de hielo y poseen una gran cola gaseosa que se forma cuando pasan cerca de Sol y les alcanzan sus vientos solares, lo que hace que el corazón se les caliente un poquito. Esos vientos de Sol son como unos imanes y por eso tienen esa vaporosa cola tras ellos. A su vez, esa impresionante cola que arrastran, es también polvo que como Sol no la puede coger, flota como el velo de una novia y sigue al Cometa como si fuera un anzuelo. En esa rotación que hacen, esa partículas se desprenden y vuelan por el espacio fingiendo ser estrellas.
—¿Y cómo nos van a diferenciar los humanos?
— Solo unos pocos nos diferencian pero eso no es lo más importante, al final todos estamos en el espacio y formamos parte de este Universo, pero os contaré algo que sí hace especiales a las estrellas —hizo una pausa y prosiguió—. Los humanos les cuentan a los niños, para que se sientan mejor y no tan solos, cuando pierden a alguien importante: la mamá o el papá, un hermanito, la abuelita... o alguien especial, incluso su mascota... que estos están en una de nuestras estrellas y que cada vez que las miren, cuando las vean parpadear, es que ese ser les sonríe y está con ellos velando sus sueños.
—¡Oh! —exclamaron al unísono.
— En cambio, a esas falsas estrellas, las de los Cometas, los humanos las ven como mensajeras de deseos.
—¿Eso que significa?
—Los humanos miran al cielo y al ver caer uno de esos fragmentos incandescentes, piden un deseo esperando que se cumpla.
Leónidas | Imagen de la red |
—A veces —sonrió la Gran Maga —. Son muy esperadas y se reúnen para verlas. Todas estas falsas estrellas, a las que llaman Perseidas, Leónidas, Oniónidas o Deltas Acuáridas entre otros nombres, suelen bailar al mismo tiempo y son muy vistosas. Es un gran espectáculo. Pero nuestras estrellas están ahí, quietas, hasta que su luz se desvanece pero somos infinitas.
Nebulosa de Cabeza de Bruja (IC 2118) en la constelación de Eridanus Imagen de la red |
Cuando contemplamos el cielo hemos de ser conscientes de que ahí hay un pedazo de nosotros mismos en cada estrella que brilla en él pues estamos hechos de polvo de estrellas.
Querida Qamar, aunque los seres humanos no quieran reconocerlo, están formados por polvo de estrellas.
ResponderEliminarBesitos
A mí me encanta mirar las estrellas, es sentir otro mundo allí y siempre he creído que de allí venimos. Mágica historia como siempre.
ResponderEliminarBeso dulce Mi Estimada Magda y dulce fin de semana.
Una historia preciosa, Mag... y es que las estrellas nos roban miradas, deseos y nos gusta soñarlas...
ResponderEliminarMil besitos de admiración y feliz finde ♥
Ainsssssss... éste es un portal mágico, porque un@ entra aquí y se convierte en niñ@ otra vez... y me encanta!
ResponderEliminarBesissssssssssss hermosa! 😘
Tu blog es una auténtica maravilla.
ResponderEliminarMuchas gracias.
Bresosss
Antes que nada, mil perdones a todos por la ausencia ya que motivos personales me tienen alejada. Agradeceros de corazón vuestra presencia ya vuestra compañía.
ResponderEliminarSigamos mirando las estrellas en este nuestro cielo.
Besitos de Qamar.