¿Lo descubrimos?
Mágico bosque Aquel que
Descubrimos. Recorrimos cada uno de sus rincones,
Embriagándonos de olores y sensaciones Maravillosas e
Inimaginables. Arroyo arriba, ¡Qué belleza!,
Una Espectacular cascada Parecía sacada de un
cuento de hadas. Emocionados, caminamos hacia ella. Los Rayos
de sol Emulaban mil arcoirís. Zizgagueamos el sendero
y nos adentramos en ella. Absortos, apreciamos una
enorme cueva, y un escalofrío nos recorrió el cuerpo...
¿Qué vimos?
¿Qué nos pasó?
¿Jugamos a imaginar?
Pon tú el punto final a la historia si deseas.
No es necesario que te extiendas demasiado.
Cuatro o cinco líneas serán suficientes.
Ensoñaciones / Jim Warren |
¿Has descubierto el acróstico? Es solo un pequeño anticipo del misterio.
Hola Qamar, pues para ser un micro tan ocurrente, con una imagen aún más bella, no te ha dado pereza ni jugar ni imaginar, jeje. Un abrazo. :)
ResponderEliminarHola, Merche :-()
EliminarNo, pereza no me ha dado, está claro.
Gracias por pasarte :-)
Un beso.
Fantasía al poder y hoy has estado brillante, me encanta la imagen se ve tan poderosa como en realidad es el agua , sin ella no existiríamos.
ResponderEliminarUn besote grande.
Creo que la imagen es un canto a la imaginación desbordante, y nunca mejor dicho.
EliminarMuchísimas gracias por tus palabras.
Un besote.
Si ese paisaje provocó pereza, no ha de haber sido buena la excursión hacia el interior de esa cueva. o todo esto esconde algo más?
ResponderEliminarBeso dulce Mi estimada Magda y dulce fin de semana.
Si se esconde algo más, puedes darlo a conocer tú mismo. Yo sé qué hay, pero es labor de cada uno, si deseáis, dejar volar vuestra imaginación y presentar al resto el descubrimiento que sí, va más allá de la cortina de agua. ¿Te animas?
EliminarUn beso, Mi Estimado Dulce, y feliz domingo.
Si yo imagino qué puede haber tras una cascada, diría que más allá hay otro mundo muy distinto a este, un mundo colorido y mágico, con seres como sacados de un cuento o de Caracolas en las nubes ;) Donde todo son considerados iguales e importantes por lo que son. Y si nos internamos más allá, podríamos vislumbrar una ciudad de cristal, con altas edificaciones que reflejan la luz de ese mundo oculto a los mortales que no creen en la magia. Tú sabes lo que hay, he acertado? ;)
EliminarOtro beso dulce Mi estimada Magda y dulce semana.
Nadie falla, porque la imaginación tiene ese poder, que todo es acertado y perfecto.
EliminarEs un descubrimiento maravilloso y, si, ahí está, tras la cortina de agua que separa dos mundos.
Mil gracias por animarte a participar y contribuir con tu magia a este increíble mundo, Mi Estimado Dulce.
Un beso.
En las cuevas de los cuentos de hadas nunca hay nada que no sea peligroso... lo bueno es que los valientes que se arriesgan a entrar siempre vuelven con algo valioso entre las manos. Los que vuelven, claro ;)
ResponderEliminarComo en todas partes, hay oscuridad y seres más o menos malignos. Atreverse conlleva su riesgo, pero también su recompensa.
EliminarMil gracias, Beau, por acercarte hasta la cascada :-)
Un beso.
Y tras la cascada descubrimos un lugar atemporal. Son muchas las fuentes de agua que se ven en su interior, y en cada una, una advertencia. Pereza, euforia, alucinación, sueño... Ya sabes, depende de que fuente bebas...
ResponderEliminarMe ha encantado tu propuesta amiga mia. Besos :D
Woww!, qué chulada, qué idea más original.
EliminarMe ha recordado algo sobre las opiniones, según de la fuente que bebas...
Mil gracias por participar, Margarita.
Un besote.
Madre mía, qué ingeniosa (pereza nahhhhhhh).
ResponderEliminar;-) ;-) ;-) Siempre con buen humor, Toro.
EliminarMil gracias por venir :-)
Un beso enorme.
cuanto arte escondes detras de cada una de tus letras
ResponderEliminar...porque desde el fondo de la cueva húmeda apenas iluminada quién sabe por qué prodigio de la naturaleza oímos brotar el eco de un ruido, un ruido que parecía un roce de viento contra la roca, un frotar de alas de murciélagos agitando el aire frío de la caverna, uno de esos sonidos agudos que por ser desconocidos nos helaron la sangre. Pero a pesar del miedo seguimos y, poco a poco, la gruta se ensanchó en un espacio enorme, casi un útero gigantesco. Quedamos alucinados. El espectáculo era poderoso. En medio de ese ámbito inmenso y apoyado sobre un atril tan alto como las cumbres del Himalaya estaba el Gran Libro de la Magia, con sus tapas rojas, abierto de par en par emulando el fruto seco del Árbol de la Luna, y un dedo, de larga y afilada uña, pasaba de una en una las páginas, para satisfacer la demanda de las Hadas que lo rodeaban, deseosas de refinar su Conocimiento de la Vida a fin de seguir atrayendo a los hombres a la Caverna del Horror, como lo habían hecho con nosotros, como lo harían con quienes se atrevieran a introducirse en el Bosque Encantado, a llegar a la Cascada Blanca y a remontar el Arroyo Azul atraídos por su magnética belleza.
ResponderEliminarAquí te dejo mi aporte, Magda. Es la primera vez que llego a tu blog y me encantó, me gustó mucho.
Saludos.
Ariel
Primero de todo, Raúl, bienvenido a este Universo Azul. Desde este momento, tienes una caracola a tu nombres dispuesta a llevarte por todos los recovecos.
EliminarSegundo, agradecida por haber participado, por este cuesto lleno de misterio y un halo de terror y, sobre todo de magia. Me ha encantado el nombre del árbol de la luna (por cierto, son llamados así aquellos que fueron el el Apolo 14). El guardián o guardiana del libro de magia, ¿sería una bruja?
Millones de gracias por acercarte y reitero mi gratitud y alegría por tenerte en estos lares.
Un beso.